Nos pasamos la vida repitiendo las mismas acciones una y otra vez. Obtenemos unos resultados más o menos deseables.
Pero ahí nos quedamos.
No vamos a obtener nada diferente a lo que ya estamos obteniendo. Mismas acciones, mismos resultados. Es bastante sencillo de entender.
Pasamos demasiado tiempo serrando y muy poco tiempo afilando.